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Los 3 mandamientos para unas piernas más delgadas

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Rebañando

Sin trucos ni efectos especiales, nada de falsas promesas ni mucho menos milagros. Aquí te damos consejos reales para tener unas piernas más delgadas, pero eso sí, si deseas obtener resultados, tienes que comprometerte de verdad a ser disciplinada para alcanzar tus objetivos. Si lo logras, ¡la satisfacción será aún mayor!

Es fácil decir que deseas perder peso, pero del dicho al hecho hay un trecho, así que si no estás dispuesta a hacer el esfuerzo, no tendrás los resultados deseados. Seguramente habrás escuchado ya de métodos revolucionarios, técnicas japonesas y dietas de 3 días que prometen resultados sorprendentes en poco tiempo, pero lo que realmente necesitas para perder peso y remodelar tus piernas es la confianza en ti misma para hacerlo y la motivación para ser constante.

Los 3 mandamientos para unas piernas más delgadas

Las 3 cosas a las que realmente debes prestar atención para cumplir tus objetivos son las siguientes:

1. La alimentación

Es bastante simple: asegúrate de que tus comidas sean sanas y frecuentes. Los nutricionistas explican que debemos hacer 5 comidas al día, que incluyen bocadillos livianos y esenciales para mantener el nivel de azúcar y grasa en la sangre, así como para mantener el metabolismo activo.

Así que recuerda:
- establece tu ingesta calórica diaria en función de tu peso y tus necesidades;
- toma algunos carbohidratos; y
- haz 5 comidas al día.

2. Ejercicios físicos

Seamos claros: sin ningún esfuerzo, no podemos alcanzar ningún resultado digno de orgullo.
Si quieres perder peso, tienes que ser constante y no rendirte si los resultados llegan lentamente.

Para lograr resultados satisfactorios en "poco tiempo", debes encontrar 3 minutos al día, 5 días a la semana, para hacer ejercicios específicos:
- camina
- corre
- ve al gimnasio (en este caso, haz ejercicios de cuádriceps)

3. Fuerza de voluntad

Mantente positiva si los resultados no llegan, aprende a disfrutar también el proceso y el esfuerzo para mejorar y cuida de ti misma (comida, relaciones y descanso) y de tu autoconfianza. Si combinas todo esto con fuerza de voluntad, ¡los resultados van a llegar!

Y recuerda: la fuerza de voluntad, al igual que un músculo, puede ser entrenada :)

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