10 síntomas que alertan de una posible hiperglucemia

Rebañando

La glucosa es necesaria, pues es nuestra principal fuente de energía. El exceso de la misma, no obstante, puede acarrear consecuencias muy negativas (como pasa con todo en la vida). Y los altos niveles de glucosa en sangre son, desgraciadamente, uno de los problemas de salud más extendidos a día de hoy. De él deriva, entre otras complicaciones, la diabetes. No siempre es fácil identificar que estamos sufriendo de hiperglucemia sin un análisis de sangre, aunque hay algunas manifestaciones que nos deberían alertar de que algo va mal. Son estas:

- Deseos de orinar casi constantemente, sobre todo por la noche.

- Dificultad para concentrarse.

- Boca seca y sed intensa.

- Lenta cicatrización de heridas.

- Visión borrosa.

- Escozor de piel.

- Aumento del apetito.

- Sensación de cansancio casi permanente.

- Problemas estomacales y problemas nerviosos.

- Aumentos de peso injustificados.

El índice glucémico de los alimentos nos indica qué tan aptos son para su consumo frecuente sin riesgo de disparar nuestro niveles de azúcar. Entre los que podemos consumir de manera diaria sin miedo se encuentran, por ejemplo, el brócoli, las nueces, las cerezas, las manzanas, las naranjas, el tomate, el yogur, los espaguetis, etc. Entre los que representan un riesgo moderado destaca el arroz. En la categoría a evitar se cuentan, por supuesto, todos aquellos alimentos con proporciones desmesuradas de azúcar (donuts, tartas...).

La actividad física siempre tiene efectos positivos en nuestra salud, se revela especialmente importante en este caso ya que a través de ella consumimos la glucosa que nos sobra y regularizamos sus niveles. Es igualmente importante mantener una buena hidratación y evitar trasnochar.

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