Cómo conservar una torta cortada por más tiempo

Seguramente te ha pasado que después de un cumpleaños o celebración ha sobrado mucha torta y no sabes cómo guardarla. El problema con los bizcochos es que se secan muy rápido, además de ser difíciles de guardar por su volumen. 

Tal vez hayas intentado de todo: envolver la torta con film de plástico y resignarte a perder la mitad del betún, cubrir la parte de arriba con papel aluminio que siempre se rompe o se mueve de sitio, dejarlo afuera e intentar terminarlo lo más pronto posible, ¡incluso bañarlo en leche!

Si te suena familiar alguno de estos casos, no te preocupes, tenemos la solución. 

Para esto sólo necesitarás dos cosas que seguramente ya tienes en tu cocina:

Pan de caja y palillos o mondadientes.

 

Al momento de guardar tu torta, sólo corta un par de rebanadas de pan para sándwich, de manera que se adapten a la superficie que quieres cubrir. Fíjalas con ayuda de los palillos o mondadientes, y listo; ya puedes mantenerla fresca por más tiempo. 

Este truco funciona por una razón muy sencilla: lo que se seca es la superficie de bizcocho que está más expuesta al frío y al aire, así que ahora lo que se secará primero es el pan de molde. 

 

¿Sencillo, no? 

 

También funciona a la perfección cuando dejas enfriar un bizcocho por varias horas y no quieres que la superficie se seque. Sólo coloca un par de rebanadas de pan encima y despreocúpate.