Los abuelos no MUEREN... ¡se convierten en nuestros ÁNGELES!
Además, es bueno que los niños sepan que pueden llorar y desahogarse. Si tratas de esconder tu dolor, quizás ellos sigan ese ejemplo, así que pasen el duelo en familia. Ver el apoyo familiar hará que el niño se sienta comprendido y acompañado.