No existe una forma más eficaz de acelerar el metabolismo que con la actividad física. El ejercicio de nuestros músculos obliga a nuestro organismo a procesar los alimemntos para conseguir los nutrientes necesarios. No es necesario realizar un gran esfuerzo, con algo tan sencillo como subir unas escalera ya estaremos obligando a trabajar a nuestro metabolismo. Lo importante es que vayamos aumentado el esfuerzo progresivamente para acostumbrar a nuestro cuerpo.