- 6
- Fácil
- 20 minutos
- Económico
Ingredientes
- - 3 huevos
- - 200 gr de harina de respostería floja
- - 125 gr de azúcar blanco
- - 50 ml de leche entera
- - 100 ml de aceite de oliva
- - 1/2 sobre de levadura (8 gramos)
- - Moldes de papel rizado para magdalenas
- - Moldes de silicona para magdalenas (opcional)
Preparación
Paso 1
En un bol grande batimos los huevos con unas varillas, con movimientos rápidos y envolventes, procurando que nos quede el batido esponjoso y aireado.
Añadimos ahora poco a poco el azúcar mientras seguimos batiendo y mezclando de la misma manera. Toca el turno del aceite, lo vertemos despacio y lo vamos mezclando con el resto de ingredientes.
Paso 2
Seguimos el mismo proceso con la leche, luego la harina, y finalmente la levadura química. Metemos la mezcla en el frigorífico y mientras se enfría colocamos los moldes de silicona sobre la bandeja, e introducimos el papel rizado dentro de ellos.
Antes de verter la mezcla en los moldes, le damos una pequeña batida ya que con el frío se habrá espesado un poco. Llenamos hasta ¾ partes y horneamos 15 minutos a 200° C. Con el calor del precalentado y a esta temperatura las magdalenas deben de subir sin problema.
Paso 3
Su estado idóneo es cuando comprobamos que están con el copete perfecto y doraditas. Este punto es importante ya que sabéis que de un horno a otro pueden variar el calor y el tiempo. Pasado el tiempo, retiramos del horno y dejamos reposar dentro de los moldes de silicona, para que asiente bien la masa.
Todos los ingredientes deben de estar a temperatura ambiente, por lo debéis retirarlos del frigorífico unos 10-15 minutos antes de comenzar con la receta.