- 20
- Fácil
- 20 minutos
- 15 minutos
- 5 minutos
- Económico
Ingredientes
- 3 huevos
- 200 gr. de harina de repostería
- 125 gr. de azúcar blanco
- 50 ml. de leche entera
- 100 ml. de aceite de oliva
- ½ sobre de levadura química (8 gramos)
- Moldes de silicona para magdalenas o moldes de papel rizado.
Preparación
Paso 1
En un bol grande batimos los huevos con unas varillas, con movimientos rápidos y envolventes, procurando que nos quede el batido esponjoso y aireado. Añadimos poco a poco el azúcar mientras seguimos batiendo y mezclando de la misma manera. Agregamos el aceite, lo vertemos despacio y lo vamos mezclando con el resto de ingredientes.
Paso 2
Seguimos el mismo proceso con la leche, luego el harina, y finalmente la levadura química. Metemos la mezcla en el frigorífico y mientras se enfría colocamos los moldes de silicona sobre la bandeja.
Paso 3
Antes de verter la mezcla en los moldes, le damos una pequeña batida ya que con el frío se habrá espesado un poco. Llenamos hasta ¾ partes de los moldes y horneamos 15 minutos a 200° C. Con el calor del precalentado y a esta temperatura las magdalenas deben de subir sin problema.
Paso 4
Su estado idóneo es cuando comprobamos que están con el copete perfecto y doraditas. Este punto es importante. Pasado el tiempo, retiramos del horno y dejamos reposar dentro de los moldes de silicona, para que asiente bien la masa.
Todos los ingredientes deben de estar a temperatura ambiente, por lo debemos retirarlos del frigorífico unos 10-15 minutos antes de comenzar con la receta.
El harina será preferiblemente de repostería.
Precalentar bien el horno a una temperatura alta (220-230°) para que luego suban bien y cojan aire, debido al contraste de calor.Precalentamos con calor “arriba-abajo”.
Una vez tengamos la masa preparada, la meteremos en el frigorífico unos 5-10 minutos. El contraste de calor al meterlas en el horno hará que crezcan mejor y con más “aire”.