- 8
- Media
- Medio
Ingredientes
- 1 Kg. de fresas
- 500g de azúcar
- 12 hojas de gelatina
- 1/2 litro de nata líquida
- 1 limón
Preparación
Paso 1
Limpiar las fresas, secarlas con un trapo, quitarles el rabito (sin retirar mucha parte de la fruta). batir el kilo de fresas haciendo un puré con ellas. Reservar.
Paso 2
Preparar un almíbar:
En un cazo, poner 100g de azúcar y añadir la cantidad de agua justa para humedecer el azúcar; poner a cocer a fuego suave y hervir hasta que esté a punto de hebra (al meter una cuchara y subirla, el almíbar caerá en forma de hilo fino). En ese momento, retirar del fuego y verter en un molde, moviéndolo para que el almíbar quede bien repartido por toda la base y parte de sus paredes.
Paso 3
A continuación, colocar en un cazo 400g de azúcar, añadir agua que justo lo cubra y poner a hervir también hasta punto de hebra.
Paso 4
Mientras, meter las hojas de gelatina en un bol con agua fría.
Una vez que el almíbar esté a punto de hebra, ir añadiendo de una en una las hojas de gelatina reblandecidas y muy escurridas; ir removiendo con una cuchara de madera para que se disuelvan perfectamente.
Paso 5
Añadir el almíbar con la gelatina al puré de fresas pasándolo por un colador; mezclar bien.
Agregar el zumo de un limón y mezclar de nuevo.
Añadir el medio litro de nata y volver a mezclar.
Paso 6
Verter en el molde que se había preparado y meter en la nevera unas horas (4 mínimo) para que cuaje.