Profiteroles rellenos de crema pastelera con chocolate

  • Media
  • Medio

Ingredientes

  • Para la masa.
  • • ¼ l de agua
  • • 75 gramos de aceite de oliva suave
  • • 150g de harina
  • • 4 huevos
  • • 10 g de azúcar (una cucharada rasa)
  • • 1 pizca de sal
  • Para la crema pastelera.
  • • 3 yemas de huevo
  • • 4 vasitos de leche
  • • una corteza de limón
  • • 3 cucharadas de azúcar
  • • dos cucharadas de harina
  • Para el chocolate.
  • • ½ l de leche
  • • 4 c de azúcar
  • • 8 onzas de chocolate
  • • 2 cucharadas de maizena
  • • 1 cucharada de mantequilla

Preparación

Paso 1

Ponemos al fuego una cacerola con el agua, el azúcar, el aceite y la sal.
Al primer hervor, lo quitamos del fuego y le añadimos la harina toda de golpe, de una sola vez, y mezclamos enérgicamente con cuchara de madera. Lo acercamos de nuevo al fuego y revolvemos hasta que la masa es homogénea, sin grumos y se despega.
En este punto la masa es más bien seca y consistente.
Separamos del fuego y dejamos que se enfríe un poco. Entonces le incorporamos los huevos de uno en uno.
No debemos añadir el siguiente huevo hasta que el anterior ha quedado bien integrado en la masa. Esto es importante para que nos quede bien.
Precalentamos el horno a 180° mientras vamos realizando unas bolas con nuestras manos, como si fueran buñuelos. Bajamos el horno a 170° y horneamos nuestras bolitas aproximadamente uos 15 minutos.
Para el relleno ponemos en una cazuela las yemas, el azúcar y la maizena y revolvemos hasta formar una masa cremosa. Añadimos la leche poco a poco mezclando bien y lo ponemos al fuego revolviendo sin parar hasta que espesa, que es enseguida.
Retiramos del fuego y reservamos.
Para rellenar nuestros profiteroles, los partimos por la mitad y usamos una manga pastelera, las hay de plastico desechable. Tampien podemos usar una bolsa de plastico a la que le cortaremos una punta.
El chocolate fundido lo hacemos de la siguiente manera. Ponemos en un bol la mantequilla y el chocolate, lo metemos en el microondas y cada 2 minutos movemos con cuchara de palo o espátula para que el chocolate se deshaga.
Una vez deshecho lo ponemos en una cacerola a fuego lento y añadimos la maizena, el azúcar y la leche poco a poco dejando que hierva un poquito y adquiera la consistencia deseada.