- Fácil
- Económico
Ingredientes
- - 2 a 3 pechugas de pollo ya fileteadas, lavadas y secadas con papel de cocina para espolvorearlas por encima con un poco de sal y pimienta negra.
- - 3 dientes de ajo pelados y picados en rodajas quitando la parte verde del medio si se quiere.
- - 1 cebolla pelada, lavada y secada con papel de cocina para que no nos salte, la picamos en la picadora en cachos grandes.
- - 100 ml. de vino blanco.
- - 100 ml. de vinagre.
- - 200 ml. de aceite de oliva suave.
- - 4 cucharadas de aceite para sofreír.
- - 100 ml. de agua.
- - 3 hojas de laurel.
- - 3 zanahorias peladas con la ayuda de un pelador ó cuchillo, lavadas y cortadas en rodajas.
- - Orégano.
- - Sal.
Preparación
Paso 1
1/ En una pota grande ponemos las 4 cucharadas de aceite de oliva, la cebolla, los dientes de ajo, las zanahorias, las hojas de laurel, el orégano y un poco de sal al gusto a sofreír dándole unas vueltas con una cuchara de madera.
Cuando esté el sofrito lo apartamos del fuego.
Paso 2
2/ En una sartén ponemos un poco de aceite de modo que cubra el fondo ó un poco menos y vamos dorando los filetes vuelta y vuelta con ayuda de una espátula. Una vez echos los incluimos a la pota.
Paso 3
3/ En un recipiente mezclamos el vino blanco, el vinagre, el aceite y el agua revolviéndolo con una cuchara. Cubrimos con ello las pechugas.
Tapamos la pota y lo dejamos que hierva. Una vez que hierva contamos 40 min controlando la temperatura que no vaya demasiado fuerte.
Paso 4
4/ Pasado ese tiempo lo retiramos y lo dejamos reposar como mínimo 24 horas.
Paso 5
5/ Al día siguiente lo calentamos ó lo tomamos frío, presentándolo bien escurrido del aceite para que no sea tan graso.
Las acompañamos de ensalada, patatas cocidas, arroz ó lo que se nos ocurra.