Sopa de cebolla gratinada al oporto
Tan solo dos días desapacibles, oscuros y lluviosos, son los que hacen falta para que el cuerpo de una empiece a echar en falta unas sopitas calientes para cenar, será cosa de la edad, o será que por fin he descubierto que las sopas son lo mejor del mundo para reconfortar cuerpo y espíritu. Así, que hoy, y con esta sopa de cebolla gratinada al oporto, queda oficialmente inaugurada la temporada otoño-invierno en mi casa.