Despídete para siempre de esos molestos rollitos en la espalda baja

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2. Consume más fibra

Incorporar alimentos ricos en fibra a tu dieta puede ser la clave para decirle "adiós" a tus agarraderas. Diversos estudios han demostrado que introducir más frutas, verduras, frijoles, avena o nueces a tu dieta puede contribuir significativamente a mejorar la digestión y sentir saciedad durante más tiempo. 

Además de ser más nutritivos que las harinas refinadas, también ayudan a restablecer el equilibrio en la flora intestinal. Tener un balance de "bacterias buenas" en nuestro estómago e intestinos está también relacionado a la pérdida de peso.