Semifrío de avellanas y chocolate
Los semifríos, son aquellas elaboraciones que por sus ingredientes y texturas gelificadas parcialmente, se consumen frías pero no heladas. Se deben congelar para poder manipularlos, pero su servicio no debe ser nunca helado, sino atemperado. Gracias a la gelatina, podemos congelar un semifrío y sacarlo del congelador para que se atempere sin que se desmonte. En la elaboración de un semifrío, la gelatina se integra en la nata, cuando ésta se descongela, la gelatina actúa como sustento o estabilizante, dando como resultado una elaboración fría pero no congelada, de donde viene el nombre de “semi-frío”, es decir frío pero no helado.
Comparte esta receta con tus amigos o familiares, simplemente escribiendo sus direcciones de correo electrónico a continuación.