Espinacas con garbanzos fáciles

De

Receta muy típica de Sevilla que yo la modifico bastante… no le pongo pan, ni vinagre y ni pimentón, en cambio le añado vino blanco y tomate frito. Apta para celíacos.

  • 4
  • Fácil
  • 30 minutos
  • Económico

Ingredientes

  • INGREDIENTES:
  • - 800 gr. de espinacas frescas o congeladas
  • - un tarro de cristal de garbanzos ya cocidos
  • - sal
  • - 7 dientes de ajo
  • - aceite de oliva
  • - vino blanco
  • - tomate frito sin gluten

Preparación

Paso 1

Ponemos una cacerola con agua y sal y cuando empiece a hervir echamos las espinacas ya sean frescas o congeladas. Las tenemos unos minutos hasta que se hagan y las escurrimos muy bien.

Paso 2

En una sartén amplia ponemos a calentar abundante aceite de oliva y doramos todos los dientes de ajo; en este caso no los he laminado, los he machacado ligeramente, los he pelado y los he dejado enteros en la sartén. Antes de que los ajos se doren del todo, incorporamos las espinacas escurridas, removemos muy bien y salamos al gusto. Dejamos que las espinacas se impregnen bien con el aceite de oliva y ajos.

Paso 3

A continuación subimos el fuego, ponemos un vaso pequeño de vino blanco y dejamos que se evapore el alcohol.

Paso 4

Bajamos de nuevo el fuego y añadimos los garbanzos escurridos, y rehogamos durante unos minutos. Finalmente ponemos tomate frito al gusto (yo le hecho muy poquito, lo justo para que coloree una pizca los ingredientes) y mezclamos todo muy bien, rectificamos de sal y dejamos un rato tapado a fuego lento.

Paso 5

Servimos en plato de barro caliente.

Lo ideal es hacer esta receta con espinacas frescas, pero si no tenéis en casa, podéis utilizar espinacas congeladas como he hecho yo. Los garbanzos pueden ser ya cocidos de bote o, mucho mejor, si los cocemos nosotros previamente.

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