Utilizamos cookies para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias y hábitos de navegación.
Si continua navegando, consideramos que acepta su uso.
Más informaciónOK
Al igual que los calamares, las sepias frescas tienen un color blanco nacarado y una cobertura brillante y ligeramente viscosa. La carne debe ser firme al tacto y elástica. Cualquier olor intenso a amoníaco o demasiado olor "a mar" es un signo preocupante.