5 consejos para cuidar tus partes íntimas

DeÁngela A., 27/04/2016

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5 consejos para cuidar tus partes íntimas

¡Seamos claros y honestos! Si nuestro cuerpo es un templo, ¿por qué no cuidar la capilla principal? Eso nos da satisfacción, incluso si es solo para sentirnos bonitas en todas partes, ¿no? Es por eso que, a continuación, te explicaremos cómo brindarle atención a tus partes íntimas para tener, digámoslo con delicadeza, la más linda de las flores…

5 consejos para cuidar tus partes íntimas

1) El arte de la depilación

Un toque por aquí, otro por allá, y terminamos de rasurarnos corriendo para podar un poco la zona antes de una cita romántica. Pero no solo deberíamos embellecer nuestro jardín por el chico que nos gusta, ¡tenemos que hacerlo por nosotras mismas también! Eso aumenta la seguridad y la autoestima, ¡es un hecho comprobado!

Hablando seriamente, es importante recordar que la piel de las partes íntimas es muy delicada, por lo que merece una atención y cuidado especiales (no como nuestras piernas, ¡que ya resisten lo que sea!), sobre todo porque se trata de una zona muy sensible que es vulnerable a los roces, la irritación y la picazón. Seguro que todavía se acuerdan de aquella vez en que sufrieron durante dos semanas por un vello encarnado, ¿verdad que sí?

Por estas razones, es importante desinfectar bien la zona después de depilarse. Si no lo haces, prepárate para darle la bienvenida a forúnculos y vellos encarnados. Además, es mejor usar la cera oriental cuando te vayas a depilar, ya que duele menos, da un resultado muy suave y duradero, y arranca los vellos desde la raíz y reduce su crecimiento después de varias depilaciones.

2) Una limpieza adecuada

Ningún extremo es bueno. Si lavas mucho tus partes, puede haber consecuencias, por lo que es mejor evitar las duchas vaginales o cualquier otro tipo de irrigación que pueda alterar la flora vaginal: se trata de todo un ecosistema bien organizado que vive feliz y en paz en nuestro interior, ¡no querríamos destruir este mundo de hadas con una manguera de alta presión! Por esta razón, lo recomendable es lavarse una vez por día con un jabón con pH neutro que respete nuestras zonas sensibles y nos garantice una vida sexual cómoda y agradable.

3) Durante la menstruación

En estos momentos, lo recomendable es lavarse dos veces por día si es necesario, pero, en especial, se deben utilizar las toallas sanitarias SOLO durante la regla y en ningún otro momento. El flujo es algo natural que sirve para limpiar la zona y lubricarla durante las relaciones sexuales, pero la vagina en general es un mecanismo autolimpiable y ¡está muy bien diseñada! Además, utilizar constantemente toallitas sanitarias causa frotes, altera la flora bacteriana y estas se pueden convertir rápidamente en un nido de bacterias.

4) En materia de sexualidad

Después de un fin de semana con un tórrido romance o de un largo periodo de abstinencia, hay que ser prudentes. En estos casos, hay dos posibilidades: por un lado, se puede experimentar una sensación de ardor y picazón debido al roce y las numerosas “intrusiones” o, por otro lado, después de mucho tiempo sin actividad sexual, el esperma (que tiene un pH alcalino) va a alterar la calma y la serenidad creada por la flora vaginal en nuestro pacífico mundo de hadas.

Por ende, en ambos casos, es mejor preparar con unos días de antelación la flora vaginal antes de tener una cita muy “activa”. Es como si le dijéramos: “bueno, se acabaron las vacaciones, ¡a entrenar que viene mucho trabajo!”. Podemos prepararnos tomando probióticos o consultando a nuestro farmacéutico de confianza para tomar cápsulas vaginales que contengan probióticos.

5) La hidratación diaria

Para tener un jardín bello y resplandeciente, sugerimos aplicar aceite de almendras dulces (es el mejor aceite para las partes íntimas), de la misma forma en que utilizamos una crema hidratante para el resto del cuerpo.

Suavidad, hidratación y felicidad garantizadas…