Menú Busca una receta, una palabra clave, un ingrediente...

Tagliatelle de cúrcuma con pavo y setas estilo oriental

De

Fusión de la comida italiana y oriental en un único plato, una mezcla de sabores que no te dejará indiferente

Puntúa esta receta 3/5 (1 Votos)

Ingredientes

  • - Para 300 gr de pasta fresca con sabor a cúrcuma:
  • 300 gr de harina de trigo
  • 3 hevos
  • 1 cuharada de cúrcuma molida
  • - Para la salsa:
  • Aceite de cacahuete
  • 600 gr de solomillo de pavo
  • 200 gr de champiñones
  • 200 gr de boletus edulis
  • 1 cebolleta
  • 1 cucharadita de tabasco
  • 2 cucharadas de salsa de ostras

Especificaciones

Personas 4
Dificultad Media
Tiempo de preparación 35minutos
Tiempo de cocción 15minutos
Coste Económico

Preparación

Paso 1

Tagliatelle de cúrcuma con pavo y setas estilo oriental - Paso 1

Primero haremos la pasta fresca de cúrcuma, ya que durante su media hora de reposo aprovecharemos para hacer la salsa.
En un bol ponemos la harina formando un volcán, y en el hueco vertemos los huevos que habremos batido previamente con una cucharada sopera rasa de cúrcuma molida.
Con la ayuda de un tenedor vamos mezclando los dos ingredientes, y cuando se pueda amasar, la pasamos a una superficie enharinada y empezamos a trabajar la masa con las manos durante aproximadamente 5 minutos rectificando de harina si viéramos que se pega en las manos (pero normalmente no es necesario).
El modo de amasado es muy fácil, cogemos la bola de masa y la estiramos hacia delante con la base de la palma de las manos, la doblamos por la mitad y repetimos este sencillo proceso hasta conseguir una masa elástica de tacto y aspecto fino.
Tras acabar el amasado hacemos una bola con la masa, la envolvemos en papel film y la dejamos reposar en el frigorífico durante media hora.

Paso 2

Tagliatelle de cúrcuma con pavo y setas estilo oriental - Paso 2

Pasado el tiempo de reposo ya podemos darle la forma que queramos. Para trabajarla mejor cortaremos la bola en cuatro partes que iremos espolvoreando con harina para evitar que se pegue. A partir de aquí hay dos maneras de continuar: manualmente o con máquina.
Para darle forma manualmente estiraremos la masa con un rodillo, dejándola con un grosor de unos 2 milímetros y con un cuchillo bien afilado ir cortando según la anchura deseada, para los tagliatelle lo haremos cada 5 milímetros.
Para aquellos que tengan la máquina, la mejor forma de trabajar la masa es coger uno de los trozos y pasarlo por los rodillos en su mayor abertura, lo doblamos por la mitad y lo volvemos a pasar. Esto lo repetiremos 3 veces consiguiendo así el ancho de los rodillos. A partir de aquí iremos reduciendo la abertura de los rodillos hasta conseguir el grosor de masa deseado (a mi me gusta dejarla al número 5). Teniendo ya la lámina, ponemos el accesorio de cortar y formamos los tagliatelle.
Ya sea con máquina o con el rodillo, según vayamos haciendo las láminas las dejaremos colgadas para evitar que se peguen (te puede servir incluso una percha limpia para esto). Insisto que hay que ir espolvoreando con harina durante el proceso porque si no, las tiras pasta se pegarán entre sí.

Paso 3

Cortamos el solomillo de pavo en filetitos pequeños. En una sartén tipo wok ponemos dos cucharadas de aceite de cacahuete (si no tenemos de este tipo de aceite podemos usar de oliva) y cuando esté caliente vamos dorando el pavo por tandas. Lo reservamos en un plato.

Paso 4

Ahora ponemos una cucharada más de aceite de cacahuete en el wok y salteamos las setas por separado hasta que estén doradas.

Paso 5

Una vez tengamos el pavo y las setas cocinadas, lo incorporamos nuevamente al wok todo junto y añadimos la cebolleta picada fina, el tabasco y la salsa de ostras, damos un par de vueltas para que se fusionen los sabores e incorporamos por último los tagliatelle que habremos hervido durante dos minutos en abundante agua con sal y mezclamos bien todos los ingredientes.

Para conseguir una buena masa de pasta fresca hay que calcular siempre un huevo por 100 gr. de harina, por lo que partimos de esta sencilla proporción para hacer más o menos cantidad según los comensales.
Es importante no añadir aceite cuando amasemos nuestra pasta fresca casera, ya que de este modo conseguiremos que absorba todo el sabor de la salsa que le incorporemos después. Y en cuanto a la sal, ya se la añadiremos en el agua de cocción.

También te gustará

Comenta esta receta

Pasta al horno con salchichas y verdura Espaguetis super picantes