¿Qué tan peligroso es beber directamente de las latas?

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Antes de beber directamente de la lata, limpia la superficie con una servilleta o un trapo limpio, no es necesario desinfectar, y mucho menos usar cloro o cualquier otra sustancia que pueda resultar tóxica. 

Si la lata está oxidada, hinchada o presenta abolladuras, no la bebas. Si está hinchada, puede deberse a que hay pequeños orificios que permiten la entrada del aire (y por lo tanto de bacterias y microorganismos) o que el producto ya ha caducado. Por su parte, las abolladuras y golpes pueden causar el desprendimiento del recubrimiento interior, y al estar la bebida al contacto con el aluminio, puede desatarse una reacción tóxica para el ser humano. Si está decolorada o se ve muy vieja, es mejor no arriesgarse.

Ahora que lo sabes puedes disfrutar de tus bebidas favoritas con toda tranquilidad y, por favor, ¡no creas todo lo que lees en internet!