No todas las recetas de patatas fritas nos llegan de los restaurantes de comida rápida. En otros países se han ganado un lugar muy especial, adaptándose a la cocina local. Tal es el caso de las patatas fritas a la holandesa, que sorprenden por su mezcla de sabores exóticos. El secreto está en su salsa a base de mantequilla de cacahuete, aunque tiene mucho más para sorprenderte.
Ingredientes para 4 personas:
800g de patatas frescas o congeladas
1 cda de aceite de cacahuete (sésamo o el que tengas en casa)
1 cebolla, para la salsa
2 dientes de ajo
2 cdas de puré de pimientos rojos picantes (o mezcla de sofrito con pimentón en polvo)
½ cda de jengibre fresco rallado
½ taza de mantequilla de cacahuete
1 ½ tazas de caldo
1 cda de salsa de soja
2 cdtas de azúcar
Sal y pimienta al gusto
¾ taza de mayonesa
Aceite para freír
1 cebolla cortada en cubos, para servir
Preparación:
Calienta el aceite de cacahuete en una olla pequeña. Corta finamente la cebolla y sofríe durante 4 a 5 minutos.
Enseguida agrega el ajo picado, el jengibre y el puré de pimientos para que se mezclen los aromas, un par de minutos más.
Lo siguiente es incorporar la mantequilla de cacahuete, el azúcar y el caldo. Cocina a fuego medio hasta obtener una salsa espesa. Retira del fuego y reserva.
Cocina las patatas a la francesas como acostumbras.
Para servir, coloca en cada plato una porción de patatas fritas. Cubre con la salsa de cacahuete, mayonesa y cebolla fresca picada.