El caldo de pollo no sólo ayuda con los resfriados. También fortalece el organismo después de enfermedades gastrointestinales. Eso sí, no la condimentes demasiado fuerte.
Ingredientes para 4 personas:
1 pollo para sopa listo para cocinar
1 manojo de verduras para sopa
2 hojas de laurel
1 cda de sal
3 zanahorias
150g de guisantes congelados
200g de fideos para sopa
Perejil al gusto
Preparación:
Colocar el pollo para sopa en una olla adecuada.
Pelar las verduras y cortarlas en dados o aros. Añadir a la olla junto con las hojas de laurel y la sal y llenar con agua fría.
Cocer a fuego lento durante una hora y media aproximadamente.
Mientras tanto, limpiar y cortar las zanahorias en rodajas.
Sacar el pollo de la cazuela y dejar enfriar. Luego, pasar el caldo por un colador y desechar las verduras y especias demasiado cocidas (podrás usarlas para hacer puré).
Vuelve a verter el caldo claro en la cazuela.
Retira la carne de pollo de los huesos, córtala en trozos pequeños y añádela al caldo. Echar las zanahorias y el puerro cortados.
Añadir los guisantes y los fideos para sopa y llevar a ebullición una vez. Cocer a fuego lento hasta que los fideos estén cocidos.
Lavar y cortar finamente el perejil y espolvorear por encima antes de servir.